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Peluquería y estilismo canino,

una profesión en alza

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Lejos quedan los años en los que el perro vivía fuera de la casa, se alimentaba de sobras y su higiene se ceñía a algún que otro “manguerazo”. Hoy día su paso por la peluquería canina es imprescindible. Los estilistas ayudan a tener un perro sano, a mejorar la convivencia en la familia, a lograr un confort entre todos, a que sea más equilibrado, detectan posibles problemas en su piel y mejoran la higiene humana y canina. El sector se ha profesionalizado con programas de formación, antes inexistentes, que han dado valor en pocos años a una profesión que es la envidia de los países de nuestro entorno. Estos profesionales trabajan por la salud del perro. Son los primeros que detectan problemas en el pelo o piel de los animales. La dignificación de su trabajo y acabar con los centros “cutre” es su principal reto

Por E. IGLESIAS

Jóvenes peluqueros con un gran bagaje a sus espaldas están hoy en la cima del estilismo cuidando con mimo la salud de los canes. Naiara García de ARAGROOMING, en Zaragoza, vive su pasión desde hace más de 20 años. En su haber, una exquisita formación de Alianz Canine WorldWide y una lista interminable de premios a nivel internacional.
“Lo que antes era un servicio de higienización hoy se ha convertido en una necesidad, en una rutina de aseo como un miembro más de la familia. Los peluqueros nos hemos ido adaptando a las necesidades reales del perro”, señala Naiara a LADRIDOS.
Aunque aún hay propietarios reacios a llevar a su perro a la peluquería, la mayoría está concienciado de que es un servicio necesario para su mascota. “Si llega un tipo de cliente que no está concienciado lo que hacemos es concienciarlo. Explicarle la necesidad que tiene el animal y ellos mismos, egoístamente, de tener un perro en casa en óptimas condiciones, bien cuidado”, matiza la estilista.
Las ventajas de una buena higiene, con los productos adecuados, son la mejor tarjeta de visita de este sector. “Principalmente el cuidado del pelo y la piel, el perro va a estar limpio y le va a manchar mucho menos la casa, porque el mantenimiento del manto hace que pierdan muchísimo menos pelo. También el olor corporal, además de una desodorización en la peluquería aportamos un perfume, con una gama muy amplia para todos los gustos”, relata esta joven estilista canina que es técnico en explotaciones ganaderas.

 Otra de las ventajas es el corte de uñas, que “aparte de alejar posibles lesiones evita que estropeen un suelo de parqué, o el sofá, o los molestos ruidos por la casa”.

 

 

Pero para llegar hasta aquí, el camino no ha sido fácil. “Yo llevo más de veinte años y he pasado de recoger pelos del suelo en una peluquería de las de antes a tener mi propio salón totalmente acondicionado. Para ello me tuve que formar mucho además de seguir con una formación constante”.
Yolanda Ruano, propietaria de Gosilandia, en Valencia, que lleva 24 años de peluquera canina, también hace hincapié en la importancia de una buena formación para ofrecer el servicio que hoy se demanda. “Una ventaja a la hora de llevar un perro a una de las peluquerías integradas en Alianz Canine Worldwide es que estamos bien capacitados, constantemente formándonos. No todo el mundo está preparándose a diario, nosotros sí”.
Por estos centros integrales de peluquería canina pasan perros de todas las razas. “Nosotros los estilistas caninos, o peluqueros caninos, estamos capacitados para cualquier tipo de raza. Y todas las razas requieren un cuidado específico según su piel y evidentemente su tipo de pelo, ya sea corto o largo”, relata Naiara.
De igual opinión es Luis del centro Sircan en Valencia. “No vale con bañarlo en su casa una vez al año con un champú que se compre por internet. Cada perro tiene unas necesidades, un tipo de pelo, aparte de la raza es importante dónde vive, qué hace, si trabaja, si está en casa”, matiza el estilista.

  

Yolanda de Acuazul, en Alicante, incide en que un servicio profesional de peluquería canina es imprescindible: “un perro de pelo corto necesita venir porque aquí no solo se le baña, también se le cortan las uñas, se le limpia las almohadillas, se le revisan las glándulas anales, se la hace limpieza exhaustiva de los oídos”.
Además, para esta estilista que lleva 24 años en la profesión, el principal problema de los perros de pelo corto en la actualidad es que con el cambio climático ahora están en una constante muda de pelo: “Antes la muda era dos veces al año, pero ahora con el cambio climático, las calefacciones, el aire acondicionado… es constante, es muy molesto ese pelo que está cayendo continuamente. Cuando vienen le hacemos un cambio de muda, le quitamos el pelo muerto y el que está a punto de caer, de soltarse, es decir, la muda y la que está por venir. Es una gran higiene, el pelo corto es el que más se incrusta en la ropa”.

 Hay una equivocación muy generalizada, según Naiara, de que los canes de este tipo de pelo no necesitan los servicios de peluquería. “Los perros de pelo corto tienen tendencia a tirar mucho pelo en casa. Es un pelo que mancha casi más que el de los perros de pelo largo. Se queda como clavado en las fibras. Los peluqueros tenemos unos vaciados de pelos especial que lo que hacemos es eliminar todo el pelo muerto, y se nota mucha mejora en casa, manchan mucho menos. Desde luego a un perro de pelo corto no se le puede hacer corte, pero sí que requiere un cuidado especifico”. 

Según Eli de Bewi Vigo, uno de los problemas es que los canes llegan a los salones caninos con el pelo roto por un mal manejo, ya que los propietarios carecen de los conocimientos necesarios. “Aquí miramos el tipo de pelo, de piel, damos un tratamiento adecuado. En casa los bañan como pueden, pero a veces no utilizan la cosmética que tienen que utilizar, ni los peinan con los cepillos adecuados, muchas veces vienen con el pelo roto. El tratamiento es personalizado en función del tipo de vida o de donde vivan. No es lo mismo los que están en finca que los que están en piso. Yo trabajo según raza y según perro, a algunos les vale con venir cada tres meses, otros lo necesitan una vez al mes”.
En lo que coinciden todos los peluqueros es en que su trabajo es un servicio que mejora la salud de los animales.
“Es imprescindible por la salud del perro. Cuidamos de su pelo y de su piel, muchas veces le vemos problemas en la piel. Podemos detectar otras cosas a mayores”, matiza Eli.
Los propietarios no tienen los conocimientos, no los deslanan igual, no los secan bien y eso le produce mogollones de problemas de piel. Cuando vienen siempre vemos que esté todo bien, que no tenga ninguna alergia ni nada en la piel, los oídos y todo”, añade esta viguesa.
“Somos los primeros que podemos ver si tiene, algún problema de piel y derivarlo a un profesional, no es cuestión sólo de peluquería”, añade Luis. “No es como antes, que bajaban al perro una vez al año como mucho, y se la pasaba la máquina, entonces se rapaba. Nos ha costado mucho concienciar de que es mejor para la salud del perro y de los que viven con él. Por higiene humana y canina”, concluye este peluquero que lleva desde 1982.
Nosotros observamos cosas que al cliente habitual le pasan desapercibidas, como pueden ser cambios de pigmentación, algún nódulo, algún bultito, y se pueden prevenir enfermedades”, señala la propietaria de Acuazul.
Según Naiara, “Un peluquero canino está formado para que se nos tenga en cuenta, nosotros somos los primeros que vemos la piel y podemos descubrir que puede existir algún problema. Nuestros servicios son una necesidad de primer nivel. Los peluqueros somos los que más y mejor podemos ver sobre todo la piel y el pelo del animal. A veces mandamos a perros al veterinario porque le descubrimos cosas en la piel”.
En cuanto al sector, todavía queda mucho por recorrer para que ocupe el lugar que le corresponde en la sociedad. “Estamos muy acostumbrados a que el servicio de peluquería sea un extra a todos los servicios que recibe el animal. Entras a algunos centros veterinarios y tiene una peluquería que suele ser un cuarto al final del pasillo sin condiciones”.

Los propios peluqueros son los más exigentes con la necesidad de elevar el nivel: “Dignificar nuestra profesión es fundamental, y tenemos que empezar por nosotros mismos. Necesitamos gente que esté bien formada, esto es muy importante, que tenga los locales acondicionados para las mascotas, no sirve tener una bañera en un rincón o encima de cualquier mesa. Hay mesas y material específico para esto, pero es básico sobre todo la formación del peluquero y dar valor a nuestro trabajo, no solo económicamente, que también, sino el problema que estamos teniendo es que hay muchas peluquerías de forma ilegal en centros veterinarios. Es decir, el veterinario tiene la actividad de veterinario y todo el tema de peluquería es como un extra sin condiciones. Igual que a nadie se le ocurriría ir a cortarse el pelo al médico, pues con los perros es igual”, matiza la dueña de ARAGROOMING, que también es Centro colaborador y miembro del equipo de Alianz Canine WorldWide internacional, “donde estamos muy concienciados en la profesionalización en todos los ámbitos, desde que entras por la puerta de un negocio”. 

Para Luis de Sircan, “El profesional tiene que estar formado. Ahora hay mucho de que pagas via online, no ves ni un perro y te dan un papelito. Esto no vale. Hay que estar formado, hay que estudiar psicología, morfología, comportamiento, no digo que tenga que ser una carrera veterinaria, pero hay que saber con lo que estamos tratando, nociones hay que tener, no sirve cojo la máquina, lo monto y ya está”.
No todas las peluquerías que hay en centros veterinarios se pueden calificar de “cutres”. “Hay clínicas veterinarias que tienen una peluquería anexa y que es una peluquería en condiciones, esto está perfecto. Pero que no se puede unificar todo de manera cutre. Hay que profesionalizarlo, y para profesionalizarlo hay que dar un buen servicio y que el peluquero tenga formación”, sentencia Naiara.
“Nosotros, además de peluqueros somos estilistas caninos, sabemos de morfología y podemos aconsejar al cliente. El resultado final, si nos hacen caso, en un par de meses se comienzan a ver. Tenemos los clientes muy contentos, es un resultado muy visual, y es nuestra mayor tarjeta”, añade.
Yolanda Ruano de Gosilandia añade una ventaja más: “psicológicamente es bueno para poder tener un perro más equilibrado, porque recibe atención profesional con un bagaje de mucha formación y también solemos educarlos un poquito”
Y cómo no, la importancia de utilizar productos de calidad sin que se resienta el bolsillo, algo que suelen temer los dueños a la hora de optar por una peluquería u otra, es fundamental. “Las peluquerías de Alianz Canine WorlwWide tenemos unos productos profesionales, Magistral Royal, naturales, con los que se puede trabajar muy bien, dan mucha calidad y no se disparan de precio. En este caso la calidad es más alta que su precio, esto es básico”, enfatiza Luis.

 Por su parte, Naiara lo tiene claro a la hora de marcar el reto futuro de su sector: “Sobre todo hay que concienciar al cliente de las necesidades que tiene el animal, crear un vinculo entre propietario y peluquero y es muy importante la profesionalización en el propio sector canino. Que los veterinarios valoren lo que es un peluquero canino con formación. Hemos tenido mucho intrusismo laboral. Cualquiera se llama peluquero canino por el simple hecho de pasar una máquina a un perro”

Fuerte apuesta por el reciclaje
Naiara es miembro del equipo de Formación de Alianz Canine WorldWide. “Empiezas desde cero, pero luego sigues haciendo formación. Hay una formación continua, porque al final trabajas en el mundo de la moda y evoluciona, las técnicas se pueden mejorar, es muy importante el reciclaje y ese continuo avance. Aquí trabajamos con animales, no es una profesión que sea fija en cada uno, además de diferentes tendencias que puedan venir. Y en formación no es solo de cursos completos, los que ya somos profesionales hacemos una formación continua, seminarios o máster class de fin de semana que suele ser una especialización o reciclaje”.

Mejor relación familia-perro
Naiara da un paso más y habla hasta de evitar abandonos: “La gente se queda alucinada, dicen ‘no pensaba que un simple baño pueden cambiar todo’. Hay gente incluso de estar pensando en desprenderse del animal por no poder llevar bien lo de tantos pelos y una higiene que les gustaría en casa, y simplemente con una peluquería mejorar esa relación entre perro y humano, y al animal evitarle el abandono”.

  

Cómo montar un centro “a pie de calle”

Los programas de Alianz en lo referente a la peluquería canina se centran “en enseñar y en formar a personas en lo que es el trabajo diario de una peluquería canina para insertar a aquellas que, por circunstancias personales o familiares, no tuvieron una formación que les permitiera introducirse en lo que es el mundo laboral y tener un oficio y una profesión”
La base de esta organización canina, que ahora está en plena expansión de peluquerías, “es una formación ocupacional, enseñar a la gente a tener un trabajo, un oficio, pero con una formación exquisita. Les enseñamos a hacer unos buenos cortes, unos buenos cuidados, unos buenos baños, que sepan de cosmética, es decir una formación que haga que ese peluquero que está formado por nosotros aprenda a ser competitivo”, indican desde Alianz a LADRIDOS.
En definitiva, “Formar a una persona para que ejerza la peluquería canina sabiendo y aprendiendo a obtener los ingresos económicos mensuales necesarios para llevar una vida digna, desahogada, de trabajador, pero una vida cómoda. Lo que no queremos es gente que aprenda a hacer un corte del caniche muy bonito y muy bien hecho, pero que luego no le sirva para trabajar el día a día en un salón de peluquería y estética canina a pie de calle”.
Alianz Canine WorlWide es la única entidad reconocida por el Ministerio de Educación para ofrecer formación en materia de peluquería y estilismo canino. Sus programas “Tienen una parte de teoría muy potente y de calidad en la que se forma al alumno en distintos aspectos y campos del animal, como puede ser dermatología, nutrición, parasitología, morfología, las partes del cuerpo, siempre troncal con auxiliar clínico veterinario, hay que saber primero qué es un perro y qué necesidades tiene”, relata Naiara.

 La teoría es el primer paso. Pero hay más. Además de formar en cómo llevar un negocio o en atención al público, “está la parte de práctica, en la que se trabaja con perros reales. Es una formación completa desde cortes básicos, cortes específicos de raza, técnicas para diferentes tipos de pelo, se conoce todo lo que es la peluquería en general”, matiza esta profesional aragonesa.

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