Los gatos tienen el corazón más fuerte que los perros
Los infartos son la causa más común de accidentes cerebrovasculares y se definen por una presentación aguda, focal y no progresiva de signos clínicos cerebrales que duran más de 24 horas. Los perros son más propensos que los gatos. Un trabajo realizado en la Universidad Autónoma de Barcelona señala que la mortalidad en esta patología es más elevada si son episodios cerebrales
Por M. ARAMBARRI
Según el trabajo realizado por el alumno de Veterinaria en la Universidad Autónoma de Barcelona, Pau Ayensa Irusta, para obtener su título de Graduado, los gatos parecen ser más resistentes a los infartos que los perros.
En la actualidad la disfunción neurológica en animales debido a accidentes cerebrovasculares (CVA) es comúnmente reconocida en la ciencia veterinaria.
Según el universitario, “Los infartos son la forma más frecuente de CVA y se definen por una presentación aguda, focal y no progresiva de signos clínicos cerebrales que duran más de 24 horas”.
Las mejor forma de diagnosticar si una mascota sufre un infarto cerebral cuando llega a un hospital veterinario con sospecha de daño de este tipo es con la realización de una resonancia magnética que confirme la lesión y permita localizar la arteria afectada.
Cuando un perro sufre uno de estos episodios, hay que tener en cuenta que puede haber muchas causas, pero en el 50% de los casos no está asociado con ninguna enfermedad médica anterior, por lo que es muy importante observar al animal en cuanto aparecen los primeros síntomas y llevarlo a un centro veterinario lo antes posible.
En esta investigación se estudiaron un total de 47 casos de infarto, en los que en el 36% de ellos había una causa conocida frente a un 64% en los que no era posible determinar en principio su origen.
Supervivencia
En cuanto a la mortalidad de los animales que sufren esta dolencia, el 78% llegan a sobrevivir frente a un 22% que no lo supera y muere.
Las conclusiones del estudio indican que hay una relación muy definida entre la localización intracraneal del infarto y la mortalidad de los perros. En concreto, más del 40% de las muertes se produce cuando el infarto es en una arteria ubicada en el cerebro medio, frente a menos un 20% cuando estamos hablando de una arteria del cerebelo rostral.
Válvula mitral
Por su parte, según AniCura, el 75% de los perros sufre enfermedad valvular degenerativa, que es la patología cardiovascular más común en los caninos. Esta patología consiste en la degeneración progresiva y sin opción de curación médica de la válvula mitral, la que permite el paso de sangre desde la circulación pulmonar al ventrículo izquierdo. Este problema ocasiona que con cada contracción cardiaca parte de sangre en lugar de salir por la aorta a la circulación general retroceda hacia la aurícula izquierda, que es lo que se conoce como regurgitación.
La regurgitación produce que poco a poco la presión de esta cavidad auricular aumente y en etapas avanzadas no se pueda realizar el vaciado correcto de la circulación pulmonar ocasionando un edema pulmonar (acumulación de líquido en el pulmón) y con este la sintomatología de dificultad respiratoria, intolerancia al ejercicio e incluso la muerte del paciente.
“Esta enfermedad no tiene tratamiento curativo. Lo que intentamos es aumentar la esperanza de vida, retrasando en fases iniciales la progresión de la enfermedad. Y, posteriormente, cuando se presenta el edema pulmonar, el tratamiento consiste en reducir la presión del sistema circulatorio pulmonar para controlar en la medida de lo posible el edema pulmonar y mantener al paciente con calidad de vida. El problema es que esta enfermedad se presenta cada vez más en pacientes jóvenes lo que ocasiona que el diagnóstico sea más devastador”, destaca Alexis Santana González, Practice Manager y responsable del servicio de cardiología de AniCura Albea Hospital Veterinario.
Cirugía como freno
Sin embargo, para los pacientes en edades tempranas existen opciones quirúrgicas que evitan el progreso de la patología, incluso en fases avanzadas se puede retrasar la progresión de la enfermedad. En este sentido, la cirugía que hoy está siendo la más buscada y reclamada por los cuidadores es la técnica edge to edge transapical, conocida como VCLAMP, que consiste en la aplicación de un clip para cerrar la abertura y requiere una ecocardiografía transesofágica 4D muy específica.
Actualmente, esta cirugía solo se puede realizar en 16 hospitales veterinarios de ocho países, entre ellos 3 hospitales de AniCura en España (AniCura Albea en Gran Canaria, AniCura Vetsia en Madrid y AniCura Ars Veterinaria en Barcelona) donde los equipos han recibido formación especializada en caso de que ocurra alguna complicación.
Los datos
22% de los perros no supera el infarto
40% es por daños en arterias cerebrales
75% de los canes sufre degeneración de la válvula mitral
(Páginas 10 y 11)
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