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EN PRIMERA PERSONA

Dana, que acaba de cumplir un
año y pesa más de 30 kilos, con su
hermanita humana de 5 años, con
la que ha recuperado el vínculo

conducta no era suficiente
en una sesión y con la pan-
demia no avanzábamos”, re-
lata Sonia.
La situación se complica-
ba y no estaban tranquilos,
pues había empezado a per-
seguir a sus compañeros
felinos, que “empezaban a
esconderse y evitaban sa-
lir a hacer sus necesidades.
Todo era un caos.”
Así ocurrió lo inevitable. Un
HUBO MUCHAS DIFICULTADES, PERO ESTA FAMILIA NO SE RINDIÓ gato pasó cerca de su plato y Dana
CUANDO LA SITUACIÓN FUE DIFÍCIL Y AL FINAL “GANÓ” A SU PERRA se abalanzó sobre él y falleció a las
pocas horas.
Un profesional, clave cuando abrió la puerta y le mordió
Y una noche Dana atacó a Sonia
en un brazo. La perra estaba des-
para no tirar la toalla controlada, su hija le había cogido
miedo. Tras muchas consultas, en-
contraron una escuela con residen-
cia para estas conductas y decidie-
ron internarla.
“Se quedaría allí dos semanas,
Lo lógico es que todo vaya bien cuando se rescata marcando pautas nuevas, con otros
un cachorro. Pero cuando el perro crece si se vuelve perros, y después, iríamos noso-
violento, amor, paciencia y ayuda son la solución tros, pero Dana no volvería a casa
hasta que no estuviera lista. Fue
duro dejarla allí, pero sabíamos que
Por Miguel PELE dientes, se nos había tirado en al- estaría bien”.
guna ocasión al pasar cerca de su Llegó el momento del reencuen-
plato”, por lo que decidieron con- tro y “cuando nos la trajeron casi no
bandonada con sus dos her- tactar con un educador. Aplicaron la conocíamos, todo en ella era dis-
manas, a las tres semanas técnicas de calma, así que “com- tinto y Dana daba vueltas a nuestro
ASonia y su familia decidieron pramos una jaula educativa para alrededor esperando un saludo”.
adoptarla. Con experiencia en pe- darle un lugar donde calmarse”. La Tras un paseo volvió a la residencia
rros grandes (loba checoslovaca), familia aprendió juegos de rastreo y y luego se la dejaron el fin de se-
con lactantes y casa de acogida, trabajaron con correa para controlar mana en casa. Todo había cambia-
entonces vivía con varios gatos. el saludo, pues se subía encima de do, pues ni los gatos le temían y se
Todo iba según lo previsto y la perra cualquiera con el que se cruzara. acercó a olerlos.
crecía y se la veía feliz. Pero nada funcionaba, más bien “Nuestra hija y ella, están recu-
Pero con 3 o 4 meses empezó a al contrario, cuando alguien se perando ese vínculo, ya no hay
mostrar una conducta de protección acercaba y Dana se encontraba en tensión, ni caos, ni miedo, ahora
de su plato, incluso gruñía mientras la jaula gruñía y lanzaba mordiscos hay juego, mimos, paseos, risas y
comía, “por lo que comenzamos a a los pies. Esto solo era en casa y amor perruno”. Siguen trabajando
aplicarle pautas para la protección con la familia, pues en la calle y con en su educación ya que no se rin-
de recursos, como darle en la mano otras personas o animales todo iba dió cuando esta adopción no salió
o premios mientras comía”. Siguie- bien. como pensaba, porque “con ayu-
ron consejos de educadores y de la Otro educador canino les dio pau- da, con buenos profesionales y con
veterinaria, pero no mejoraba. tas para entender el lenguaje corpo- ganas, todo es posible”, concluye
“No solo gruñía y sacaba los ral de Dana, pero “reconducir esa Sonia.

Nº 62 abril 2022 LADRIDOS 33