Centenares de perros mueren infectados por la orina de roedores
Las autoridades del Ayuntamiento de Nueva York han lanzado un aviso por las redes sociales a los dueños de perros después de que varias mascotas se hayan contagiado de leptospirosis, una enfermedad comúnmente asociada con las ratas.
Por M. ARAMBARRI
Un miembro del Consejo de la ciudad dijo a finales de enero que su oficina había recibido “informes de múltiples muertes de perros” en el vecindario de Williamsburg en Brooklyn.
“Los datos que han llegado a nuestra oficina indican que los perros jugaban en McCarren Park Dog Run (un parque específico para perros) antes de enfermarse”, dijo el miembro del consejo Lincoln Restler en una primera publicación en las redes sociales en la que alertó a los dueños de perros sobre la enfermedad bacteriana potencialmente mortal que se propaga a través de la orina de animales infectados.
A los dos días el mismo concejal añadió que su oficina había recibido un informe sobre posibles casos de leptospirosis que “supuestamente causaron la muerte de cuatro perros” que habían estado en el parque canino de Brooklyn.
Por su parte, el Departamento de Salud de la ciudad le dijo a la prensa al día siguiente que no habían confirmado informes de leptospirosis canina relacionada con McCarren Park, aunque añadió que “estaban trabajando con el departamento de parques de la ciudad para inspeccionar la actividad de ratas allí”.
Ante la alarma creada, el Departamento de Salud se vio obligado a emitir un comunicado en el que insta a los propietarios de canes a acudir de manera inmediata a su veterinario si observan algún síntoma. “Los dueños de perros que estén preocupados deben consultar a su veterinario sobre la vacunación y buscar atención veterinaria temprana si su perro está enfermo”, dijo el departamento de salud en un comunicado.
También envió un mensaje a los veterinarios pidiendo que rápidamente se informe de cualquier caso detectado. “Instamos a los veterinarios que reciban resultados positivos de leptospirosis a informarlo al Departamento de Salud según lo exige el Código de Salud de la Ciudad de Nueva York”.
Por su parte, el Departamento de Parques quiso quitar hierro al asunto y señaló que, aunque “no se ha confirmado un “brote” de casos reportados”, “nos gusta que nuestros amigos de cuatro patas estén felices y saludables, y nos entristece saber que algunos cachorros pueden haber sido afectados recientemente por la leptospirosis”, dijo el Departamento de Parques en un comunicado enviado a los medios de comunicación. “Estamos comprometidos activamente con el Departamento de Salud y Salud Mental, y explorando opciones para mitigar cualquier riesgo relacionado”, matizaron.
Nada más saltar la alarma, trabajadores municipales reemplazaron los cubos de basura por otros resistentes a las ratas en el área y un exterminador realizó una inspección extra en la zona en busca de ratas, aunque la última vez se había realizado tres semanas antes, confirmó, el Departamento de Parques.
“Entendemos el motivo de preocupación e instamos a los dueños de perros a estar atentos y cautelosos al pasear a sus mascotas”, agregaron en el comunicado.
El concejal Restler dijo que las preocupaciones resaltan la necesidad de abordar “la infestación de ratas y las condiciones subyacentes para garantizar que los perros y toda nuestra comunidad estén a salvo”.
Aunque las autoridades locales no parecen estar muy preocupadas por la situación, la impresión de profesionales caninos o propietarios de perros que suelen visitar la zona es muy diferente. Dakarrie García, un entrenador de perros local, le dijo al medio de comunicación ABC New York que estaba preocupado por las condiciones en el parque.
“Es repugnante. Si miras alrededor del recinto canino, hay agujeros de ratas por todas partes”, denunció García.
El Departamento de Salud dijo que investiga alrededor de 15 casos de leptospirosis canina cada año y que los “grupos” de la enfermedad son “muy raros” y añadió que “Los propietarios no deben dejar que sus mascotas beban de charcos u otras fuentes de agua que puedan estar contaminadas con orina de rata”.
La leptospirosis es una enfermedad infecciosa causada por bacterias que pueden producir infecciones potencialmente mortales de los riñones, el hígado, el cerebro, los pulmones o el corazón.
Las ratas constituyen un importante reservorio para el contagio de Leptospira a los perros y, a veces, a las personas. Las ratas apenas se ven afectadas por la enfermedad, pero siguen siendo portadoras durante años y en sus colonias abundan los individuos mejorados.
Los perros también pueden contagiar Leptospira a las personas y a otros perros a través de la orina. Tras la infección, muchos se convierten en portadores crónicos sin mostrar aparentemente ningún problema de salud. Esto puede exponer a las familias y a otras mascotas a una enfermedad grave si no se aplica una higiene estricta. La enfermedad puede ocasionar en ciertos casos la muerte, tanto a los perros como a las personas.
Los síntomas observados en el perro van desde muy leves o inexistentes hasta muy graves, dando lugar en este último caso a un cuadro que rápidamente acaba en la muerte.
Pueden incluir fiebre, escalofríos, vómitos, Ictericia (coloración amarillenta), como consecuencia de la aparición del hígado, orina oscura, deshidratación acusada, congestión de las mucosas, letargo, dolores musculares o diarrea y generalmente aparecen de una a dos semanas después de la exposición. En algunos casos, la enfermedad puede causar insuficiencia renal o hepática.
A diferencia de las infecciones causadas por los virus, la leptospirosis es una enfermedad bacteriana, y por esa razón puede ser tratada con diversos antibióticos. El tratamiento de soporte para los órganos dañados también resulta primordial.(Páginas 34 y 35)
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