La Inteligencia Artificial (IA) descifra características de los perros a través de sus ladridos
Una nueva investigación ha mostrado cómo se pueden utilizar modelos de Inteligencia Artificial (IA) para revelar información de los perros en función de sus ladridos. No quiere decir esto que se trate de traducir en lenguaje humano los ladridos perrunos de estas tres razas, eso es imposible, sino que se puede identificar la emoción, el género e incluso la raza tras oír un ladrido determinado. Con IA de última generación se ha conseguido decodificar el lenguaje secreto de los ladridos de tres razas caninas: chihuahuas, caniches y schnauzer.
Por Carlos XESTAL
Los investigadores están utilizando modelos de Inteligencia Artificial para decodificar parte del lenguaje secreto de los perros. El estudio proviene de investigadores de la Universidad de Michigan, el Instituto Nacional de Astrofísica de México y el Instituto de Óptica y Electrónica. Los prometedores resultados, presentados hace unos días en una conferencia internacional, muestran cómo los modelos actuales de IA podrían ser clave para comprender los lenguajes animales, al menos hasta cierto punto.
En ningún caso se trata de traducir los ladridos de los perros de las tres razas estudiadas, caniche, schnauzer o chihuahua al lenguaje humano, eso es totalmente imposible. La investigación lo que ha demostrado es que determinados ladridos de los perros, decodificados con complejos sistemas de inteligencia artificial, pueden dar información de las emociones concretas de los animales, así como determinar su género si es macho o hembra, o incluso su raza.
A través de un comunicado de prensa, Rada Mihalcea, directora del Laboratorio de IA de la Universidad de Michigan indicó que ““Hay muchas cosas que aún no sabemos sobre los animales que comparten este mundo con nosotros. Los avances en IA se pueden utilizar para revolucionar nuestra comprensión de la comunicación animal, y nuestros hallazgos sugieren que tal vez no tengamos que empezar de cero”.
El estudio utiliza un modelo de habla de IA de última generación, Wav2Vec2, para identificar la emoción, el género y la raza de un perro detrás de un ladrido determinado.
Los investigadores utilizaron dos conjuntos de datos diferentes para el entrenamiento y compararon los resultados: uno se entrenó desde cero solo con ladridos de perro, y el otro se entrenó previamente con el habla humana y luego se ajustó con precisión los ladridos de 74 perros: 42 chihuahuas, 21 caniches franceses y 11 schnauzer.
El conjunto de datos incluyeron grabaciones de 48 perros hembras y 26 machos, la edad promedio del perro fue de 35 meses, oscilando entre los 5 y los 84 meses
Este modelo de IA entrenado en humanos y perros fue capaz de identificar la emoción de un perro con un 62% de precisión, la raza también con un 62% de precisión, el género con un 69% e incluso identificar un perro en particular de un grupo con un 50% de precisión.
Para conseguir las vocalizaciones de los perros se les expuso a varios estímulos, con la participación del dueño y/o un experimentador.
Como ejemplos de estas actuaciones indican situaciones como que el experimentador toca repetidamente el timbre de la casa y golpea la puerta con fuerza; el experimentador simula un ataque al propietario; el dueño le habla cariñosamente al perro; el dueño estimula al perro utilizando los objetos o juguetes con los que normalmente juega el perro; o el propietario realiza la rutina normal que precede a una caminata; el dueño ata al perro con una correa a un árbol y se pierde de vista.
Las reacciones de los canes a estos estímulos se grabaron por espacio de entre 10 segundos y 60 minutos.
La raza
Una vez con todos los datos en la mano, los investigadores concluyeron a la hora de predecir la raza de un perro que “diferentes razas tienen distintos tonos, por lo que el modelo acústico debería poder identificar esas diferencias, independientemente del contexto”.
El sexo
En cuanto a identificar el sexo de un perro tras oírle ladrar, los profesores llegaron a la conclusión de que es la tarea más difícil entre todas los objetivos que se propusieron, teniendo más aciertos cuando el animal es hembra.
La emoción
Al tratar de desentrañar la emoción detrás del ladrido de un perro, los investigadores plantean la hipótesis de que la vocalización de un perro está relacionada con su contexto. La evidencia existente sugiere que los sonidos que hacen los monos y los perros de la pradera se pueden predecir en función del contexto de la situación en la que se encuentran. Algunas de las emociones que los investigadores intentan asignar a los perros en este estudio son ladridos agresivos, ladridos normales, chillidos negativos y gruñidos negativos. Si bien es probable que los perros experimenten muchas más emociones, estos ruidos estaban en gran medida disponibles en su conjunto de datos.
“Al utilizar modelos de procesamiento del habla entrenados inicialmente en el habla humana, nuestra investigación abre una nueva ventana sobre cómo podemos aprovechar lo que hemos construido hasta ahora en procesamiento del habla para comenzar a comprender los matices de los ladridos de los perros”, dijo Mihalcea.
(Páginas 16 y 17)
Ladra sólo cuando te dé la orden